La Hermandad de Vogue

Existe una religión en nuestra galaxia, a la que solo tienen acceso las mujeres y cuyo último fin es que todo el universo sea solo femenino. Esta religión es la Hermandad de Vogue.

Las hermanas están consagradas a la Hermandad y están casadas con su dios de por vida. No importa que dejen la Hermandad o renieguen de ella. Según la Hermandad, siempre serán una hermana.

El dios al que están consagradas tiene el nombre de Vogue, que no tiene representación física: ni cara, ni cuerpo, ni nada de nada. Lo único que puede representarlo es el símbolo que se puede ver al principio de este artículo.

Aunque las hermanas están casadas con un dios que no tiene representación física, las adeptas se quedan regularmente embarazadas por inseminación artificial, dejando a la prole bajo el cuidado de más hermanas de la Hermandad. La «cuidadoras» son normalmente las que son muy jóvenes para concebir o que son estériles. Cuantas más hijas tenga la adepta (ya que solo se inseminan cigotos femeninos), más subirá en los escalafones de la Hermandad.

El orden jerárquico de las hermanas son (de abajo arriba):

• Hermana cuidadora. O simplemente cuidadora. Es el escalafón más bajo de la Hermandad. Lo componen hermanas que aún no han tenido hijas o que nunca tendrán hijas. Lo normal suelen ser niñas que aún no han tenido la menarquia aunque también hay hermanas estériles que quieren cuidar de niñas pequeñas. A estas mujeres, el resto de hermanas las suelen llamar de forma despectiva yermas. A partir de este nivel todas las demás se llaman hermanas paridoras.
• Hermana novata. Se llega a este nivel cuando una hermana consigue dar a luz a una niña viable y viva.
• Hermana novata con suerte. Un nivel por encima de novata. Se consigue este escalafón si en el primer parto se da a luz a más de una niña viable y viva.
• Hermana numeraria. Cuando la hermana tiene 3 hijas en varios partos. Hay que hacer notar que si una Novata con suerte da a luz a 3 o más niñas, no conseguirá pasar de escalafón hasta que de a luz otra vez.
• Hermana supernumeraria. Cuando una hermana llega a 6 hijas paridas.
• Sacerdotisa. Cuando la hermana llega a 12 hijas paridas.
• Papisa. Cuando la hermana llega a 20 hijas paridas.

Hay hermandades repartidas por toda la galaxia y en ellas las hermanas suelen vivir para parir y/o cuidar. Las hermandades suelen estar regidas con mano de hierro por una Sacerdotisa o una Papisa. En general, la primera Papisa que consiga serlo será la que rija la hermandad en la que se encuentre. La hermana que llega a ser Sacerdotisa en una congregación y ya hay Papisa en la misma, suele crear otra hermandad en otro sistema solar (normalmente alejada de la de donde venía).

Cuando una hermana paridora no está pariendo suele estar trabajando para poder aportar el 50% de su trabajo a su hermandad. Recordemos que cada hermandad la rige una Sacerdotisa o una Papisa, incluyendo la economía de su hermandad.

Las hermandades suelen tener diferentes niveles dentro de esta religión:

• Nivel 0. Una Sacerdotisa que acaba de fundar una nueva hermandad con sus hijas, algunas Cuidadoras (pudiendo ser estar algunas de sus hijas) y alguna Numeraria que quiere que sus hijas vivan en otra hermandad. El número de hermanas en un nivel 0 suele variar entre 15 y 20. Aunque puede ser que hayan menos. En este nivel el edificio en el que vive la hermandad todo es muy básico, tanto en infraestructuras como en servicios.
• Nivel 1. El número de hermanas varía entre 20 y 40. El edificio ya cuenta con zonas bien diferenciadas entre Cuidadoras y Sacerdotisa (y Papisa), además de cocina y salón de juegos.
• Nivel 2. El número de hermanas suelen estar entre 40 y 80. Poseen varios edificios, siendo alguno de ellos un pequeño hospital ginecológico y pediátrico (en el que se seleccionan los cigotos femeninos) y algunas de las hermanas trabajan en hermandad sin ser Cuidadoras.
• Nivel 3. Instalaciones con más de 80 personas, varios edificios, zonas verdes, campos de cultivos, etc. con un gran hospital ginecológico y pediátrico.

Las mayores críticas que les llueven a la Hermandad es que nadie sabe dónde consiguen el esperma para poder inseminar a tanta hermana. De momento nadie ha conseguido averiguarlo y por lo que paren las hermanas de esta religión, no parece que tengan problemas para conseguir dicho material genético.